En el principio Dios entregó al hombre el fuego. Un arma para detener el mal. Esta parece ser la declaración de intenciones de Grant Morrison. Los Dioses a los ojos del ser humano y quizá las habilidades que éstos otorguen para tratar de detener el mal. Un mal que desde los albores de la humanidad siempre ha sido derrotado, como cosa rara, una y otra vez por el bien, pero ahora la balanza va a equilibrarse y las tornas puede que cambien. Se anuncia el día en que mal ganará. Libra ha llegado. Esta es la premisa de la Crisis Final.
Para mí la palabra Crisis aplicada en el Universo DC significa caos, destrucción, sálvese quien pueda, en pocas palabras, un verguero. Todo ello desde las primeras páginas de la historia. Pero esta vez no. El autor, Grant Morrison se desmarca de lo que suelen deparar los primeros números de estos megaeventos, donde los acontecimientos frenéticos y las impactantes revelaciones te hacen quedar mamando y desear que el siguiente número, se encuentre disponible para descargarlo (como se hace, si por aca en el tercer mundo, no llegan). Morrison no hace eso, no. Parece que quiere ir más allá y que su historia no se desinfle y se venga abajo por su propio peso. Se dedica a poner las piezas del juego sobre la mesa, a ponernos en situación, para, a partir de ahí, comenzar a edificar su historia. Una historia que promete ser enorme, espero que también en su desarrollo, pero sobre todo, en metáforas y simbolismos. Precisamente algo presente desde las primeras páginas del número. Un gran comienzo que me ha parecido tremendamente lírico donde vemos los tintes que puede tomar la historia. Y un número interesante y muy bien contado de tal forma que resulta difícil no seguir el hilo de la trama.
La jugada es que varias subtramas vengan ya comenzadas y que, si coges el número sin haberte informado de lo acontecido antes, puede que no te queden ganas de probar con el siguiente. De todas formas, yo lo leí, habiedome pillado Countdown, Salvation Run, La Muerte de los Nuevos Dioses, y lo disfruté. Mucho. Y creo que es gracias precisamente a la forma en que está narrado. De ser más caótico o menos elaborado posiblemente ahora estaría echando pestes por mis dedos pero Morrison deja de lado, de momento, su rollo transgresor e innovador que deberas, aveces, aburre.
Tanto decir lo bien contada que está la historia pero con un incompetente dibujando perdería gran parte de su encanto. Afortunadamente, el elegido ha sido J.G. Jones, admirado por su labor de portadista en 52, y que a pesar de su calidad no ha dejado de sorprenderme. Me atrevo a vaticinar que estamos ante el cómic de superhéroes mejor dibujado del año. Ahí es nada. Las palabras para describir su trabajo sobran. O mejor dicho, me faltan.
Poco más tengo que añadir. Éste es el Morrison que me gusta. En apariencia, estamos ante una Crisis poco convencional, porque esa situación que le da nombre a la historia no se vislumbra. Pero las sensaciones han sido buenas y la lectura satisfactoria. Ya hay ganas de ver qué nos depara el siguiente número . Pero no puedo acabar sin decir que me gustaría ver esta historia, acontecimientos actuales del universo aparte, sin ataduras de continuidad, en la línea AllStar como el viejo Grant pensó en un primer momento y pudiendo desarrollar todo el tema de los Nuevos Dioses a su antojo, sin tener que ceñirse a nada. Pero habrá que disfrutar con lo que hay, que, de momento, no es poco.
Aca lo pueden bajar: FINAL CRISIS
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